domingo, 20 de febrero de 2011

Parasomnias, Sonambulismo (307.46)

Las personas que presentan sonambulismo, desarrollan actividades motoras automáticas que pueden ser sencillas o complejas. Un individuo sonámbulo puede salir de la cama, caminar, orinar o incluso salir de su casa, mientras permanecen inconscientes y sin probabilidad de comunicación. Es difícil despertarlos aunque, en contra de lo que se cree comúnmente, no resulta peligroso. El sonambulismo se produce durante las fases 3 o 4 del sueño, es decir, la etapa denominada sueño lento o sueño de ondas lentas (SOL). Es más frecuente en niños y adolescentes. Su causa es desconocida y no existe ningún tratamiento eficaz.

Se cree, erróneamente, que el sonambulismo es la interpretación de los movimientos físicos que efectúa el individuo en las escenas que está realizando durante su ensoñación. Pero la realidad es que el sonambulismo se presenta durante las horas de la noche en las que aún no se ha presentado la etapa o fase de movimientos oculares rápidos (REM), que es en la que se producen los sueños.

El 19% de la población mundial es propensa a padecer sonambulismo y los hombres tienden más a esta patología que las mujeres.

Actividades como comer, bañarse, orinar, vestirse, o incluso conducir vehículos, silbar, y cometer asesinatos han pasado durante el sonambulismo. Los sonámbulos realizan sus actividades con los ojos abiertos de manera que pueden explorar sus alrededores, y no con sus ojos cerrados y sus brazos extendidos, como se los muestra a menudo en parodias de dibujos animados o películas. Las víctimas de esta afección pueden tener los ojos cristalinos o de apariencia vacía y si son interrogados, el sujeto responderá lentamente y será incapaz de responder en una manera inteligible.

Los sonámbulos corren más riesgo de dañarse a sí mismos que a otros aunque a veces ha sido usado como defensa en juicios por casos de asesinato.

A menudo la mejor manera de lidiar con sonámbulos de forma segura es dirigirlos directamente de vuelta a sus camas. Sin embargo, la persona puede continuar levantándose hasta que el o ella haya cumplido con la tarea que disparó el episodio en primera instancia. Por ejemplo, si un sonámbulo está limpiando ayudar en la limpieza puede ayudar a terminar el episodio. Dado que los sonámbulos tienden a no recordar nada de lo dicho o hecho durante el sonambulismo, no hay necesidad de preocuparse de situaciones vergonzosas por su parte o por parte del protagonista del episodio. Los sonámbulos son muy sugestionables. Todo lo que ven y escuchan pueden activar otro comportamiento.

En 1846, Albert Tirrell fue declarado no culpable de asesinato e incendio, argumentando que estaba sonámbulo. Esta fue la primera absolución por sonambulismo en la historia de la defensa jurídica de Norte América. Otro caso es el de Kenneth Parks, un joven de 23 años que atacó a su suegro dejándolo inconsciente y apuñaló a su suegra, después fue a la comisaría diciendo: "Creo que han matado a algunas personas". Estaba ensangrentado y su mano fue gravemente herida. Parks no pudo recordar nada sobre el asesinato, y no tenía motivos para cometerlos. Fue absuelto y ni siquiera fue ingresado en un psiquiátrico ya que el sonambulismo no es jurídicamente considerado como un trastorno mental.

No hay comentarios:

Publicar un comentario